lunes, 23 de abril de 2018

Bolsas de yuca que al llegar al mar se disuelven en el agua

El biólogo indonesio Kevin Kumala diseñó unas bolsas hechas de yuca que son 100% biodegradables y que al contacto con el agua, se disuelven y se convierten en alimento y bebida.

Kevin Kumala nació en Balí, Indonesia. Pasó su infancia recorriendo las paradisíacas playas de ese país del Sudeste asiático, regocijándose con su belleza y pureza. Abandonó su país durante diez años para estudiar bilogía en Estados Unidos. Pero lo que vio al regresar en el año 2009 lo dejó atónito: las playas de su infancia eran ahora basureros irreconocibles.
El indonesio le dijo al diario Southeast Asia Globe que “cuando me iba a surfear o a bucear, esto ya no representaba un placer para mí. Encontraba plástico en cualquier lugar que visitaba en Bali. Esto se convirtió en algo muy frustrante para mí”.  Por eso, Kumala decidió hacer algo.
Sabía que en un mundo que bota al mar ocho millones de toneladas de plástico al año, decirle a la gente que dejara de consumir productos desechables era un proyecto a largo plazo, y que por eso, debía ingeniárselas para diseñar una solución en el corto plazo.
Fue así como surgió Avani Eco, una empresa que produce implementos que son similares al plástico a la vista y al tacto, pero que están hechos con productos 100% biodegradables. La idea es tan innovadora que este año recibió el premio “Most Valued Bussines Indonesia”, que premia a las iniciativas más responsables con el medio ambiente en ese país.
Su producto bandera es una bolsa hecha con almidón de yuca. Indonesia produce cada año 25,2 toneladas de este tubérculo, y usándolo, Kumala se ideó una bolsa tan resistente como las convencionales pero que, al llegar al mar, se disuelve y no deja ningún residuo tóxico. En tiempo máximo durante el cual la bolsa existe es de 100 días. Una bolsa plástica regular puede tardarse hasta 400 años en desaparecer.
Avani Eco, la compañía que fundó hace tres años, crea además productos hechos con materiales como la caña de azúcar y la maicena. Pitillos, cajas portables de alimentos, envases para llevar el café, saleros y pimenteros, vasos y cubiertos son algunos de los productos que Kumala ha diseñado.
Si bien la iniciativa ha sido aplaudida en diversos escenarios, está claro que lo que hay que atacar es la raíz del problema: el consumo excesivo de plástico en las sociedades industrializadas. Y es que, en este sentido, los datos son alarmantes: en enero de 2016, un informe de la Fundación Ellen MacArthur reveló que si la humanidad no se detiene, para el año 2050 el plástico presente en el océano pesará el doble que los peces que allí habitan.
Fuente: "El espectador- 24/7/2017

domingo, 22 de abril de 2018

Sobreenvasado de las frutas y verduras

Hoy Día de la Tierra, nuestros activistas han desplegado esta madrugada dos grandes pancartas en el supermercado Carrefour del Centro Comercial La Gavia, de Madrid, para denunciar el uso masivo e innecesario de plásticos de un solo uso con los que los establecimientos alimenticios cubren sus productos, especialmente las frutas y verduras.
Las pancartas, una una de ellas de más de 140 metros cuadrados, recogen la imagen de nuestro planeta, colocado sobre una bandeja de poliespan y cubierto con un film y en ellas se puede leer el mensaje “La única capa que la Tierra no necesita. #NoPlastic”.

El objetivo de la actividad es denunciar la enorme cantidad de plásticos de un solo uso innecesarios y en ocasiones hasta ridículos que llenan nuestros carros de la compra y que acaban contaminando los océanos. Cada año, más de 12 millones de toneladas de plástico llegan al mar, de los cuales el 80% procede de fuentes terrestres. Se estima que cada año más de un millón de aves marinas y más de 100.000 mamíferos marinos mueren a causa de los plásticos que se encuentran en los océanos (Programa Medioambiental de Naciones Unidas (UNEP).


Durante años se ha permitido a las empresas la producción en masa de productos de plástico de un solo uso y se ha fomentado un consumo desenfrenado de los mismos. Actualmente, las empresas siguen eludiendo su responsabilidad en los productos que venden, y la desplazan hacia las personas consumidoras. Estamos condicionados a pensar que nuestra fruta y verdura necesita estar envuelta en plástico por medidas higiénicas, aunque sepamos que la naturaleza ya ha pensado en ello y lavemos nuestros productos antes de comerlos de todas formas.
Sin embargo, cada vez son más las personas que rechazan el viejo discurso de que los plásticos de usar y tirar son inevitables y que son conscientes de que el reciclaje no es ninguna panacea a la contaminación por plásticos. Es necesario que los supermercados lideren este cambio y comiencen a ofrecer productos a granel y otras alternativas a los plásticos. De lo contrario, estos residuos seguirán llegando en cantidades ingentes al medio ambiente, y afectando tanto a la fauna marina como al ser humano.

Día de la Tierra

Resultado de imagen de 22 de abril

El Día de la Tierra se celebra cada 22 de abril para favorecer la concienciación sobre la necesidad de proteger el planeta frente a la contaminación y la sobreexplotación de recursos naturales.


Google se suma este año a la jornada con un 'doodle' animado en cuya elaboración ha colaborado la primatóloga Jane Goodall.


Resultado de imagen de 22 de abril

lunes, 2 de abril de 2018

Estrategia europea sobre plásticos

La adopción de la primera Estrategia sobre plásticos ha permitido, a juicio de la Comisión Europea, sentar las bases para una nueva economía sostenible del plástico, constituyendo igualmente un elemento clave en la transición hacia una economía circular y baja en carbono, además de representar un avance en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 y los propios del Acuerdo de París.

Una de las pretensiones es que, antes del año 2030, todos los envases plásticos del mercado de la UE sean reciclables o reutilizables, que se reduzca el consumo de plásticos de usar y tirar, y que se restrinja la utilización deliberada de microplásticos.


En este marco, transformar la forma en la que se diseñan, fabrican, utilizan y reciclan los productos plásticos permitirá a Europa liderar la solución al problema de los residuos generados por los mismos, al tiempo que propiciará la creación de empleo y nuevas oportunidades de negocio.
Los expertos no se cansan de repetirlo: “Si no se cambia la forma de producir y consumir, en 2050 habrá más plásticos que peces en nuestros océanos”.
Frans Timmermans, vicepresidente primero de la Comisión Europea y responsable de desarrollo sostenible, abunda en este posicionamiento, manifestando al respecto que debe impedirse que los plásticos lleguen a las aguas y los alimentos.
Una de las pretensiones es que, antes del año 2030, todos los envases plásticos del mercado de la UE sean reciclables o reutilizables, que se reduzca el consumo de plásticos de usar y tirar, y que se restrinja la utilización deliberada de microplásticos.
La solución reside en minimizar los residuos plásticos a través de su reciclaje, una tarea que, en todo caso, debe abordarse de forma conjunta por los gobiernos, la industria y los ciudadanos.

Reciclaje, innovación y financiación

Rentabilizar el reciclaje de los plásticos constituye otro de los objetivos de la Estrategia y, con tal fin, se articularán nuevas normas con las que mejorar la recuperación del plástico presente en los envases, permitiendo aumentar al mismo tiempo la demanda del reciclado.
En este sentido, se estima que la mejora de las instalaciones de recogida de plástico y el propio incremento del reciclaje supondrán un ahorro de alrededor de 100 euros por cada tonelada, al tiempo que se creará más valor añadido a fin de fortalecer el sector a través de una mayor competitividad.
Con la visión puesta en ese objetivo global de alcanzar una tasa de reciclaje del 50% de los residuos plásticos antes de 2040, seis organizaciones europeas (PRE, ECRA, PCEP Europe, Petcore Europe, EuPC y VinylPlus), en colaboración con la Comisión Europea, han adoptado un marco de compromisos voluntarios a fin de dar continuidad y ampliar las actividades de reciclaje del plástico existentes.
Asimismo, y con la pretensión de impulsar la utilización del plástico reciclado, la Comisión prevé lanzar una campaña de compromiso para la industria europea a fin de promover la utilización de 10 millones de toneladas de plásticos reciclado en la producción de nuevos productos en el mercado europeo de aquí a 2025.
Se reforzará igualmente el apoyo a la innovación, con 100 millones de euros adicionales procedentes del programa Horizonte 2020 de la UE, de cara a financiar el desarrollo de materiales plásticos más avanzados y reciclables, la creación de procesos de reciclaje más eficaces y el seguimiento y retirada de sustancias peligrosas y contaminantes de los plásticos reciclados.

Basuras marinas

La estrategia contempla igualmente distintas medidas para hacer frente a la basura marina, toda vez que el 80% está conformada por plástico.
A través de cambios legislativos, ya se ha reducido la utilización de bolsas plásticas en Europa, y el foco de atención se centra ahora en otros plásticos de usar y tirar, así como en los aparejos de pesca y la restricción de la utilización de microplásticos en los productos, proponiendo normas para la definición y etiquetado de los plásticos compostables y biodegradables a fin de ayudar a los consumidores a tomar decisiones informadas.
Asimismo, y dado que, al menos el 20% de la basura marina procede de fuentes marítimas, se contemplan acciones para resolver el problema de los desechos marinos procedentes de instalaciones portuarias a fin de que la basura generada en los barcos o recogida en el mar sea gestionada correctamente en tierra.
Fuente original:  www.sogama.gal-29-03-2018